Un hombre que causó lesiones graves a menor de edad en atropello, fue condenado en Pucón, tras aceptar su responsabilidad en un procedimiento abreviado.
La audiencia de lectura de sentencia se desarrolló este martes en el Juzgado de Garantía de la comuna, instancia en la cual se dio a conocer las penas en contra de Jorge Barrera Danielle, quien el 17 de agosto de 2018 atropelló al estudiante de 14 años, Julián Morales Sanzana, cuando éste cruzaba el paso peatonal de calle Camino Internacional rumbo a su establecimiento educacional, resultando con graves lesiones en una de sus piernas.

El imputado fue sentenciado a la pena de 800 días de presidio como autor de cuasidelito de lesiones graves y por el delito de haber huido del lugar sin prestar auxilio a la víctima, se le condenó a 295 días de cárcel. Además como penas accesorias deberá pagar una multa de 4 UTM y como contaba con antecedentes por delitos de conducción, se le inhabilitó en forma perpetua para manejar, es decir nunca más podrá volver a obtener licencia de conducir.
El Tribunal concedió la petición de la defensa en relación a la forma de cumplimiento de las penas privativas de libertad, pues éstas serán cumplidas mediante el arresto domiciliario nocturno, por lo que durante 3 años el condenado deberá estar en su domicilio en la ciudad de Curacautín.
Tras conocerse la decisión del Tribunal, la madre de Julián, Jacqueline Sanzana Jiménez, se declaró conforme con las penas asignadas, expresando “a mi me hubiera gustado que pagara en la cárcel, pero lamentablemente la ley es tan blanda en este tipo de hechos. Ahora al menos él tendrá reclusión nocturna en su hogar por lo que tendrá que irse de la comuna. A mi hijo aún le queda un camino largo para recuperarse completamente, si bien ahora él va al colegio, sigue en controles y en agosto debe volver a someterse una nueva cirugía”.
El fiscal a cargo de la causa, Jorge Calderara, expuso que a Jorge Barrera Danielle, se le aplicaron las penas más altas que establece la legislación.
Finalmente cabe recordar que este hecho se originó por el exceso de velocidad del condenado y el hecho de no ir atento a las condiciones del tránsito, pues no respetó un paso peatonal.