
Esto ya me está pareciendo demasiado extraño. El ser humano está siendo privado completamente de su libertad. Y le pongo un ejemplo. La gente ni siquiera puede reunirse en sus Iglesias. Y eso que yo no soy religioso. Para mí, la espiritualidad consiste en ser pacífico, bondadoso, generoso, amoroso, etc. Pero para la gran mayoría de la gente, la espiritualidad consiste en ir a rezar y a cantar a una Iglesia. Y resulta que ahora tienen estrictamente prohibido hacerlo, bajo el pretexto de que no mantendrán los dos metros de distancia. Bueno, pero si vamos a usar ese criterio, pues bien, que nadie viaje entonces en taxi, ni en bus, ni en colectivo, ni en metro, ni en avión, ni siquiera en un auto particular. Y podría ponerle mil ejemplos más.
En la historia de la humanidad, jamás, ningún Faraón, ningún Rey, ningún Emperador, tuvo tanto poder como el que tiene hoy la O.N.U., y por ende, la O.M.S. ¿Por qué ese afán enfermizo de que a la gente se le enfríe el corazón? El cariño, la amistad, la ternura; se están yendo al reverendo carajo. Producto de todo esto, al ser humano lo están convirtiendo en un ser apático, frío, miedoso, desconfiado. ¿Cuánto tiempo más el ser humano resistirá ese montón de órdenes, que le enfrían el alma, que le tienen la guata vacía, los bolsillos livianos, y el miedo como estandarte? ¿Y adentro de los hogares? ¿El calor del amor, habrá sido reemplazado por la frialdad del miedo?
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