El plebiscito constitucional es un hecho el domingo 25. Los partidarios de una y otra opción se encuentran en tierra derecha de la campaña de propaganda liderados por los partidos políticos, como se presumía.
A su vez, los independientes se ven y suenan poco, también como se presumía.En este sentido, la franja televisiva diaria de propaganda, algunas marchas de adherentes, lienzos y pancartas, “palomas” en algunos sitios, escasos mensajes radiales, son quizás las muestras más notorias de un extraño ambiente eleccionario.
Mención aparte merecen las redes sociales en las que abundan una creciente polarización, consignas, mensajes vacíos con casi nula presencia de argumentos sólidos que informen adecuadamente al electorado.Respecto a la televisión abierta, proliferan espacios de supuestos debates y análisis abiertamente sesgados con la complicidad de los moderadores de los canales.Los independientes no figuran.
Pero… ¿qué está faltando, además, al plebiscito? Falta un fundamental reglamento que norme los pasos que seguirán al resultado del mismo. La reforma constitucional que abrió paso a este referéndum no lo incluyó y entonces se deberá dar después del plebiscito, redactado por los mismos convencionales.
Esto tomará tiempo y el debate que origine la preparación de ese reglamento coincidirá con las campañas para los comicios municipales, de gobernadores y convencionales en abril del año próximo. Así se politizarán aún más las elecciones de convencionales que deben tener objetivos propios, distintos a los de campañas electorales municipales y regionales.
Otra interrogante es ¿qué pasará con los independientes que no pertenecen a ningún partido político? Las elecciones de convencionales se regirán por el mismo sistema D’Hont proporcional que se ha utilizado para los parlamentarios con listas de partidos o de pactos electorales.
Este sistema permitió en los últimos comicios que candidatos de partidos o de pactos electorales que obtuvieron el 1% de los votos fueran electos en desmedro de candidatos independientes que reunieron el 10% o más de los sufragios y que no fueron electos.
Por otro lado, la Ley General de Elecciones, cuya aplicación está a cargo del Servicio Electoral (SERVEL), señala que los candidatos a cualquiera elección deben estar inscritos a más tardar 6 meses antes, es decir, en este caso antes de noviembre próximo. Además, los candidatos independientes a convencionales deben reunir 2 mil firmas ante Notario para inscribir sus postulaciones. En la práctica, no tendrán opción de participar.
Es de esperar que en los pocos días que restan antes del plebiscito, el SERVEL explique e informe a la ciudadanía acerca de estas y varias otras interrogantes que hasta ahora rodean el importante acto cívico.