En audiencia desarrollada al medio día de ayer, el fiscal Ítalo Ortega formalizó al ex sacerdote D.F.C. por abuso sexual infantil reiterado, ocurrido entre 2011 y 2013 en Caburgua, en contra de un niño que en ese entonces tenía entre 6 y 7 años de edad. El persecutor pidió la prisión preventiva por estimar que la libertad del imputado era peligrosa para la sociedad y la víctima, pero el juez de Garantía rechazó la privación de libertad y lo dejó con cautelares de menor intensidad. El fiscal anunció que apelará dicha resolución.
El imputado, ex párroco de la iglesia Nuestra Señora de los Dolores de Perquenco, fue detenido en Caburgua por oficiales de la BRISEXME de la PDI, en cumplimiento de una orden concedida por el Juzgado de Garantía de Pucón.
El hecho por el cual fue formalizado quedó al descubierto en 2018, cuando el menor contó lo que le había pasado en el marco de la indagatoria que abrió la Fiscalía por delitos sexuales ocurridos al interior de la iglesia.