EE.UU, es sin discusión el país que junto a CHINA, encabezan las dos potencias más poderosas del mundo por su poder económico y militar. Los países que están bajo el poderío de estos dos gigantes deben someterse a las reglas del juego que dictan ellos y bailar al ritmo que se les exige si quieren seguir viviendo en condiciones medianamente aceptables. Así son los Imperios. Rusia sin ser tan poderosa como China o USA, también se da sus aires de grande por su poderío nuclear, su gran producción de petróleo, gas y cereales, pero no le da para ser el tercer poder del planeta, menos ahora con su pulsión expansionista de don Vladimir que tiene la banca y los capitales fiscales y particulares muy castigados.
Es por esta razón de poder, que el Presidente Gabriel Boric ha asistido al llamado a reunión que ha hecho la Casa Blanca a todos los mandamases de todas las Américas, salvo arbitrarias excepciones. Allí el dueño y señor del gallinero es JoeBiden. Aquí, en este escenario, es fundamental “vender” confianza. Presentar al país como un campo propicio, seguro, estable y confiable a los inversionistas de todo el mundo y de USA, principalmente. De no ser así, nuestra economía, que es capitalista, aunque nos duela, no tendrá viabilidad. El Presidente G. Boric, se mostró sólido, solvente y hasta valiente en sus discursos reconociendo la postura izquierdista de su Gobierno y tirándole las orejas a las arbitrariedades de USA al no invitar a los díscolos. Es cierto, lo trataban con afecto, pero: ¿le creerán? No sé.
Internamente y en el diario vivir de Chile, la realidad no es tan bonita y todos sabemos por qué. Para todos, el devenir es incierto con lo que serán las aplicaciones reales de la Nueva Constitución en cada territorio de Chile. También para todos es preocupante el creciente poder de fuego, armas, bronca e inconsciencia del lumpen organizado que mata sin miramientos.
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