En una jornada marcada por la incertidumbre geopolítica y las expectativas en torno a las decisiones de los bancos centrales, el dólar en Chile experimentó un giro dramático que refleja la volatilidad actual de los mercados financieros globales. La moneda estadounidense logró revertir su tendencia bajista inicial para cerrar con ganancias significativas, mientras el peso chileno se debilitaba ante un cóctel de factores internacionales y domésticos.
El dólar se fortalece en medio de la tensión global
La divisa estadounidense protagonizó una montaña rusa durante la sesión de este martes. Tras iniciar la jornada con una tendencia a la baja, el billete verde logró recuperarse y cerró con una ganancia de $9,20 pesos respecto al día anterior, alcanzando los $945 por unidad.
Durante la sesión, la volatilidad fue evidente: el dólar tocó un máximo de $946,70 antes de moderar ligeramente, mientras que en su momento más débil marcó un mínimo de $933,05. Esta oscilación refleja la incertidumbre que domina los mercados ante múltiples frentes de tensión.
«Pese a esta señal de enfriamiento en el consumo, el dólar no refleja grandes variaciones a nivel global», comentó Ricardo Bustamante, subgerente de estudios de Capitaria, refiriéndose a los datos de ventas minoristas estadounidenses que cayeron más de lo esperado en mayo.
El cobre bajo presión por las tensiones comerciales
Uno de los principales lastres para el peso chileno fue el comportamiento del cobre, metal que históricamente ha sido un pilar fundamental para la divisa nacional. El precio del metal rojo cayó un 0,83% a US$4,82 la libra, mientras que en la Bolsa de Metales de Londres el valor al contado retrocedió un 0,85% a US$4,259 la libra.
Felipe Sepúlveda, analista jefe de Admirals, explicó que «el mercado evalúa el impacto de posibles aranceles estadounidenses y comentarios de economistas que advierten sobre un potencial ajuste de los precios si se alivian las tensiones en la oferta».
Geopolítica y refugio seguro
El conflicto en Medio Oriente continúa generando ondas de choque en los mercados, aunque su impacto parece estar siendo absorbido gradualmente por los inversionistas. Michael Pfister, analista de divisas de Commerzbank, señaló a Reuters que «aunque Israel e Irán se atacan entre sí, diría que el mercado está un poco insensible a este conflicto, al menos en lo que respecta al mercado cambiario».
Esta relativa calma contrasta con lo que tradicionalmente ocurriría ante escaladas geopolíticas de esta magnitud. El índice del dólar subió un 0,83% a 98,81 puntos, mostrando que mantiene su atractivo como activo refugio.
Todas las miradas puestas en la Fed y el Banco Central
Los mercados aguardan con expectación la reunión de la Reserva Federal estadounidense, donde se espera que mantenga las tasas de interés sin cambios el miércoles, aunque las señales sobre la política futura serán cruciales.
En Chile, Ignacio Mieres, jefe de análisis de XTB Latam, advirtió que «es importante tener en cuenta que se espera un aumento en la volatilidad en el tipo de cambio, ya que el mercado se prepara para nuevas definiciones sobre la política monetaria local».
Sepúlveda añadió que «el dólar operaría en niveles más débiles si no fuera por el conflicto geopolítico», subrayando cómo los factores externos continúan dominando el panorama financiero chileno.